El diseño interior de una vivienda de dimensiones reducidas puede suponer un gran reto. Pero con las intervenciones precisas se puede lograr un ambiente armonioso, organizado y funcional. Aquí te dejamos algunas ideas prácticas para sacar el máximo potencial a los espacios pequeños y hacer que parezcan mucho más amplios.
Menos es más
En espacios pequeños, esta icónica frase de Mies van der Rohe tiene especial connotación. Tener espacios reducidos amerita el uso exclusivo de lo que necesitamos. Aquello que hará de nuestra vivienda un espacio funcional y cómodo a la vez. Es imprescindible hacer un ejercicio de síntesis y deshacernos de todos los elementos que puedan recargar nuestros espacios.
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Balance en la distribución
Este es un punto clave al momento de diseñar espacios pequeños. Es necesario priorizar y fusionar usos. Además, seleccionar el mobiliario adecuado en cuanto a forma, tamaño y cantidad.
DOStudio, Arq. Carla García Pezzotti | © Emilio Rodgar
La circulación es crucial en la distribución de los espacios. Una alternativa es conectar ambientes con puertas corredizas para sacarles el máximo provecho. O directamente eliminar barreras y particiones internas para unificar espacios y eliminar zonas muertas.
Hágase la luz
La iluminación natural siempre hará que nuestros espacios se sientan más amplios. Por esto, en la medida de lo posible utilizar grandes ventanales y multiplicar las entradas de luz. Los materiales también pueden aportar en este sentido. El vidrio y los materiales transparentes como el acrílico, dejan pasar la luz y ocupan poco espacio visual. Los espejos colocados estratégicamente harán que los espacios luzcan más grandes.
Dis. Daniela Betances Copello| © Harold Lambertus
Para generar profundidad y variedad de volúmenes es necesario incluir iluminación artificial y puntual. Resulta útil direccionar puntos de luz hacia el techo y áreas donde se generen zonas de sombra.
Sitmob, Dis. Mariela Montás | © Harold Lambertus
Más allá del blanco
Aunque el blanco es el color que más refleja la luz, existen muchas otras opciones de tonalidades que se pueden utilizar para dar luminosidad y sensación de amplitud a los espacios, y además dotarlos de calidez y personalidad.
Indoor, Dis. Carmen Ariza | © Misael Ramirez
Colores como el gris, el beige y el crema son ideales para su aplicación en espacios de reducidas dimensiones. Y en sentido general, todos los colores claros, ya sean azules, verdes o rosas, contribuyen a que los espacios parezcan mucho más amplios.
Es importante pensar no solo en los colores de las paredes, sino también en el color de mobiliario, telas y accesorios.
Aprovechar la altura
Cuando la propiedad lo permita un recurso eficaz puede ser la implementación de espacios a doble altura.
Indoor, Dis. Carmen Ariza | © Misael Ramirez
Además generar sensaciones ópticas utilizando muebles de proporciones más largas y estrechas, pues dirigen la vista hacia arriba y facilitan la percepción de mayor altura.
Mobiliario
La forma de los muebles es también un elemento importante a tomar en cuenta. Las mesas redondas, por ejemplo, son ideales para espacios pequeños pues facilitan la circulación, ocupan menos espacio visual y permiten albergar más personas al mismo tiempo.
DOStudio, Arq. Carla García Pezzotti | © Emilio Rodgar
Según la diseñadora Carmen Ariza, la proporción es fundamental en cualquier proyecto. Nos cuenta que “un espacio reducido no requiere de muebles pequeños; si no de un diseño a la medida con ideas que unifiquen y con elementos que definan el ambiente a la escala correcta“.
Sitmob, Dis. Mariela Montás | © Harold Lambertus
Los muebles multifuncionales son un gran recurso en los que merece la pena invertir. Ayudan a optimizar y flexibilizar el espacio. Los muebles modulares por su parte, suelen ser una opción más económica que aporta gran versatilidad y son un gran aliado para sacar el máximo potencial a los espacios pequeños.
Little Dreamers, Dis. Jhisel Vargas | © Elvin Hernandez
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| Imagen de portada Indoor, Dis. Carmen Ariza | © Misael Ramirez